Decoración de interiores

Los años 60… Qué bonita época ¿verdad? No sé si muchos de aquí la habréis vivido en directo, o si lo único que sabéis de ella es a raíz de la música o de las películas, pero esos tiempos cambiaron al mundo, y a la decoración también. Fueron momentos muy alocados y una vez más… para la decoración también!

En los años 50 todo era aún muy clásico, desde la vida en si hasta los muebles. Los años 60 irrumpieron con frescura para todos, cambios de música, cambios de ropa, y lógicamente cambio de nuestros apreciados muebles y estilos!

Es la pareja de colores que más contrasta, el Yin y el Yang, el todo y la nada. También es la pareja de colores más versátil, y que, bien utilizada, proporciona más elegancia. Buen ejemplo de ello es este apartamento parisino, en el que residen una pareja con un bebé.

El salón-comedor se ha decorado en un estilo clásico. Las paredes y el mobiliario son blancos, y se ha dejado al color negro para acentuar, a través de cojines, marcos y lámparas. Los tapizados de rayas verticales en las sillas clásicas aportan más elegancia al conjunto.

El estilo escandinavo es característico por el abundante color blanco y la funcionalidad del mobiliario. A éste, podemos añadirle detalles coloridos, piezas de estilo vintage, para dar un carácter especial a cualquier estancia.

Un papel pintado de motivos coloridos cambia por completo un living que sólo tenía colores neutros. Si a esto le añadimos un sillón Luis XVI con un tapizado retro, tenemos como resultado un salón vital para nada soso.

Si buscas una estética innovadora y con mucho carácter, el estilo industrial es una buena opción. Muy utilizado a la hora de adecuar antiguos locales y fábricas como vivienda, encanta a muchos y no deja a nadie indiferente.

El mortero de cemento es uno de los materiales estrella de este estilo, pulido para suelos y paredes, o revocado en paredes tanto interiores como exteriores. También es muy común decapar pintura en algunas paredes para dar ese aspecto de fábrica tan característico, o bien dejar el ladrillo visto y envejecido.

La decoración de estilo provenzal viene de la región francesa de la Provenza. Los hogares provenzales de antaño tenían un toque rústico y campestre; eran simples pero no por ello menos bellos. Ahora podemos trasladar su luz, sus intensos colores y su especial ambiente a nuestras casas.

La terracota es uno de los materiales más comunes para revestir el suelo. Para una decoración provenzal es ideal dejar las paredes de piedra al descubierto siempre que nos sea posible; en caso de que nuestra vivienda no sea de muros tradicionales un detalle muy bonito es dejar una o dos paredes con el ladrillo al descubierto, y darle un aspecto envejecido.

Menos es más: una gran descripción para este loft de sólo 58 metros cuadrados. Las distintas estancias se han distribuido en dos alturas. En la planta baja, el salón comedor, la cocina  y el baño; arriba, el dormitorio. Una discreta escalera de caracol metálica une ambas plantas ocupando un mínimo de espacio en la estancia principal.

De un sólo vistazo puede observarse toda la vivienda: espaciosa, aparentemente muy amplia y moderna con una decoración que verdaderamente se luce.