Decoración de interiores

¿Por qué no poner en las habitaciones de los más pequeños muebles rescatados del pasado? Además de individualizar su espacio y convertirlo en único e irrepetible y por consiguiente: hacerlo diferente, tendremos la satisfacción de haber ayudado a mejorar el mobiliario de su habitación y en un futuro su agradecimiento.

¿No os parece preciosa esa cuna azul?

Pero ya no es solo cuestión de muebles, sino que el espíritu vintage intenta transmitir cada uno de los elementos que forman la habitación, el sabor inconfundible de otras épocas.

Crear un buen ambiente y comodidad en una habitación es importante. La mayoría de las visitas no ven el dormitorio por lo que puede revelar mucho de la persona.

Hay opciones para redecorar una habitación de varias formas y esto hace una gran diferencia.

Descansar bien es muy importante: para rendir al día siguiente, para tener buena salud y mejor humor. Para ello es necesario tener un dormitorio adecuado, ordenado y en el que nos sintamos cómodos.

El Feng Sui, un sistema ancestral de estética de origen chino, nos puede dar las claves para un dormitorio armonioso, cómodo y perfecto para el descanso.

Lo primero a tener en cuenta es la posición de la cama. Se aconseja colocarla en la pared más alejada de la puerta de entrada al dormitorio. Además, es importante que la cama tenga un cabecero. El cabecero simboliza nuestra estabilidad.

Es la pareja de colores que más contrasta, el Yin y el Yang, el todo y la nada. También es la pareja de colores más versátil, y que, bien utilizada, proporciona más elegancia. Buen ejemplo de ello es este apartamento parisino, en el que residen una pareja con un bebé.

El salón-comedor se ha decorado en un estilo clásico. Las paredes y el mobiliario son blancos, y se ha dejado al color negro para acentuar, a través de cojines, marcos y lámparas. Los tapizados de rayas verticales en las sillas clásicas aportan más elegancia al conjunto.

El estilo escandinavo es característico por el abundante color blanco y la funcionalidad del mobiliario. A éste, podemos añadirle detalles coloridos, piezas de estilo vintage, para dar un carácter especial a cualquier estancia.

Un papel pintado de motivos coloridos cambia por completo un living que sólo tenía colores neutros. Si a esto le añadimos un sillón Luis XVI con un tapizado retro, tenemos como resultado un salón vital para nada soso.

El blanco. Ese gran color. Aunque unos dicen que no se debe considerar color y es más bien la ausencia del color. Como el negro es la mezcla de todos. Quien sabrá… Lo que sé es que en decoración, el blanco sea lo que sea es un GRAN AMIGO, y queda fenomenal en casi cualquier ocasión. Se podría decir que sin duda es el color comodín.

Tanto en la decoración clásica como en la más actual y moderna, sino, fíjense en lo acertado del trabajo de interior en esta preciosa habitación blanca. Sin duda muy moderna, urbana, y juvenil!