El papel pintado, aquel recurso tan socorrido entre los años 60 y 80 del siglo pasado, vuelve y con fuerza. Hay tal variedad de papeles pintados que es casi imposible no encontrar alguno que nos convenga. Los diseñadores de interiores nos aportan grandes ideas para hacer uso del papel pintado más allá del que estamos más acostumbrados. Vamos a ver tres usos contemporáneos del papel pintado, ya no se trata de elegir un papel y llenar una habitación con él, hoy en día se puede y se debe ser más creativo.

Los diseñadores nos han mostrado un interesante camino, en lugar de empapelar toda una habitación lo que haremos será empapelar sólo una pared o una porción delimitada de ella. Se crea así un importante atractivo visual que crea un punto de interés muy fuerte. Este recurso resulta muy elegante, sobrio y económico.

Otro uso interesante es empapelar el interior de los armarios, despensas o también el fondo de los muebles abiertos como las estanterías. Nos sirve además este inteligente recurso para renovar algunos muebles que estén ya un poco deteriorados por el tiempo.


Y hablando de usos inteligentes esta tercera propuesta lo es y mucho. Muchas veces queremos poner algún cuadro pero no nos decidimos ni por el tema ni por las imágenes concretas. Pues como veis en la imagen superior unos cuantos cuadros enmarcando pedazos de papel pintado pueden crear un conjunto coordinado y a la vez asimétrico. O podemos colgar tiras a modo de banderolas verticales como en la imagen inferior.

Fotos: interiordesignonadime.com

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