Huyendo del tipismo propio de las decoraciones de Halloween al uso, he estado buscando soluciones más elegantes y sofisticadas. He encontrado estas ideas que desde luego a los niños les resultarán aburridas y sosas, pero a los que ya no somos niños nos resultarán como mínimo soportables.

Algunas son muy elegantes y apropiadas para cualquier ambiente o nivel de relación. Podemos invitar a nuestro jefe y no quedar como unos patanes.

Bonitas y elegante decoraciones con elementos estacionales y propios de la fiesta, calabazas blancas, plantas, hojas con los colores otoñales, velas y flores de temporada en tonos claros. El hogar encendido para caldear los primeros fríos de la temporada y la repisa de la chimenea decorada con calabazas y ramas de árbol con las hojas amarillas.

Una sencilla presentación para las velas colocadas dentro de tarros de cristal acompañadas con dulces típicos de Halloween. La cesta portabotellas de leche da un estupendo toque vintage al conjunto.

Una entrada decorada con un mismo tono en distintos gradientes transmite sofisticación y estilo. Toda una selección de calabazas recubre los escalones del porche.

Las calabazas, en algunas de sus variedades, son tan espectaculares que no necesitan gran  cosa para llenar una estancia con su sola presencia. Estas calabazas con su diseño natural en varios tonos de color son de una gran belleza y con unas pocas hojas de árbol que les añadamos ya tenemos suficiente.

Unos sencillos haces de paja rodeando el marco de la puerta y un par de escobas de fibras vegetales son suficientes para decorar la entrada.

Calabazas decoradas de forma original y Jack-0-‘lantern dentro de un gran tarro de cristal. Decoración para aprovechar el último calor del otoño en una merienda en el jardín.

La presentación de la mesa también es importante para esta festividad, marcadores con forma de escoba de bruja para que los invitados sepan donde sentarse. Pequeñas calabazas de colores como decoración de mesa crean un ambiente entrañable y adecuado a la ocasión.

Sencillos, discretos pero elegantes centros de mesa realizados con pequeñas calabazas blancas, algunas usadas como candelabros para las velas. Y toda la composición sobre un lecho de hojas de árboles viradas a los colores otoñales.

Fotos: shelterness.com

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