¿Sientes que tus habitaciones están apagadas y necesitan un brochazo decorativo? ¿Has probado a decorar con objetos en blanco? Estos elementos te ayudarán a que las estancias se iluminen, recuperando su espíritu particular. Son pequeños trucos que solucionan aspectos decorativos básicos de la vivienda, aportando luz, expresividad y energía al hogar.
Puedes buscar objetos de muchas clases, como jarrones decorativos, lámparas, mesas o móviles colgantes, la mayoría realizados en cerámica o porcelana, materiales que resultan muy atractivos visualmente. Situados en lugares estratégicos de las habitaciones, lograrán su objetivo, focalizando parte de la atención. Son complementos decorativos que brillan por su carisma y hacen el lugar más acogedor y agradable.
Hemos comentado en anteriores ocasiones que el blanco clarifica los espacios y aporta neutralidad y equilibrio, si bien a algunas personas les puede parecer un color monótono y falto de carácter. Para que esto no ocurra, podemos probar a combinar el blanco con un punto de color más cálido. Estas leves pinceladas aportan armonía al decorado: el objeto en blanco se verá reforzado e incluso más equilibrado, si cabe, gracias a esta miscelánea. Otras posibilidades para darle más vida son las clásicas, como añadir flores y tallos verdes a los jarrones, formando una decoración exquisita.
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