Ha pasado el invierno y el patio vuelve a ser un espacio vital más de la casa. Tras el abandono hibernal es normal que nuestro patio se encuentre algo gris y afectado por los elementos climáticos de esa dura estación. Es el momento de comenzar a vivir de nuevo fuera de casa y el patio necesitará una puesta a punto para que resulte atractivo. Vamos a ver una docena de consejos que te ayudarán a revivir tu patio, darle nueva vida y hacerlo más vivo y actual.
Las telas como sabemos son un elemento decorativo de primer orden y posibilitan grandes transformaciones con poca inversión y trabajo. Cambiar las fundas de los cojines será una forma fácil de renovar nuestro patio.
También podemos instalar alfombras en nuestro patio para cambiar el look y además para hacernos la estancia más cómoda.
Una sombrilla aparte de su clara función práctica es también una forma de aportar color y verticalidad al diseño de nuestro patio. Una solución fácil y no demasiado onerosa.
Los viejos muebles pueden recuperarse con una simple mano de pintura. No se necesita mucho más, incluso la tela de los almohadones puede beneficiarse de una sencilla transformación usando un poco de pintura.
La sombra es un bien indispensable en el patio, sobre todo en verano, hay muchas formas de conseguir una zona de sombra en nuestro patio. Los gacebos o pérgolas se pueden encontrar en un gran abanico de precios, seguro que encontramos alguno de estos elementos que puede acomodarse a nuestro presupuesto.
Crear un pequeño ámbito privado es fácil de conseguir gracias a las cortinas que podemos añadir a nuestra pérgola. Un poco más de intimidad siempre viene bien a la hora de disfrutar de nuestro patio.
La decoración de nuestro espacio al aire libre será importante para que nos sintamos a gusto. La luz es uno de los elementos a cuidar especialmente para disfrutar de las noches de verano. Ahí nuestro gusto es el que debe guiarnos para elegir las soluciones más acertadas en cada caso.
Dotar a nuestro patio de todos los elementos necesarios para nuestra comodidad es una buena forma de transformarlo y al tiempo convertirlo en un espacio más habitable. Desde una sencilla mesa para tomar el desayuno hasta una completa cocina de exterior. Nuestras circunstancias personales son las únicas que marcarán el límite.
Fotos: bhg.com