Cubre-radiadores con mucho estilo

En ocasiones la visualización de un radiador en mitad del cuarto puede romper con la armonía decorativa. Si no son piezas bonitas o desentonan con el resto del mobiliario, debemos cubrirlos para que pasen desapercibidos. Podemos taparlos con la colocación estratégica de otros muebles que disimulen su presencia, o bien utilizar un aliado muy efectivo: los cubre-radiadores.

Con estos soportes, que pueden ser de madera u otros materiales más estilosos como la laca o el esmalte, se consigue camuflar adecuadamente el radiador de forma que quede integrado dentro del propio estilo de la habitación. Si tenemos más de uno en la misma habitación, podemos también jugar con distintos tipos de cubrimientos, obteniendo una decoración dinámica y rica en contrastes.



Podemos aprovechar los cubre-radiadores para añadir una nota de color, un detalle decorativo u otro tipo de aporte que realce la estancia con un añadido sutil pero eficaz.


En cuanto a su diseño, los cubre-radiadores se han sumado a las últimas tendencias decorativas, y los formatos que podemos encontrar en el mercado son muy variados y con una estructura innovadora y muy cuidada.


Además de cumplir esta función, estas estructuras nos permiten aislar la calefacción por completo, sobre todo cuando está demasiado fuerte y emite mucho calor. Así, este tipo de cubrimientos nos ofrecen un valor añadido, además del puramente estético.


Fotos: modayhogar.com ; blog.muebleslluesma.com ; modayhogar.com ; decoracion2.com ; emoble.es.

Te puede interesar:

Ver comentarios