5 posibles problemas en casa al volver de vacaciones Artículo Publicado el 29.11.2018 por Libelula

Las vacaciones han sido maravillosas… tanto que no queremos que se terminen. Pero, como nos pasa a todos, en algún momento tendremos que volver a casa. Y será, volver al trabajo, a nuestros proyectos pendientes y nuestra vida cotidiana.

Y así como han sido de hermosas… toda esa alegría puede transformarse por completo sólo al llegar a casa ¿Por qué? Porque hace unos días (o varios) que no estamos y las sorpresas no tardan en llegar.

Desde robos, un pequeño incendio, problemas con el agua, una puerta que no abre, un cristal roto, ventanas dañadas, cortes de electricidad, el toldo está caído… y la lista de problemas puede seguir de tal forma que no se imaginan. Ahora, vamos a verlos y clasificarlos a todos para poder tomar la mejor decisión. ¿Cuál es? Que, aunque muchos se resistan a la idea o lo vean como un “gasto que no quieren hacer”, contratar un buen seguro de hogar es la verdadera y única solución para todos los inconvenientes que podemos encontrarnos en casa. Y sin importar si nos vamos de vacaciones o no.

Problemas…

1- Robos

Un clásico problema en casa, de esos que pensamos que nunca nos pasarán. ¡Atentos! Puede pasarnos y cuando menos lo imaginamos. Y esos robos pueden ser sólo en exterior o también en interior. ¿Se imaginan llegar a casa y que faltan cosas importantes? Incluso esas joyas y accesorios que tanto nos gustan…  Los malvivientes siempre tratan de estar “un paso adelante” de nosotros y pueden controlarnos sin que lo notemos, pero siempre puedes tratar de evitarlos siguiendo estos consejos de Verti, ¡Estar protegidos es sumamente importante!

2- Incendios

Ya sea por un accidente eléctrico o con el gas. O incluso por otros motivos, puede haber en casa pequeños incendios que dañen nuestra propiedad (pequeños o más grandes). Si bien podemos tomar precauciones antes de salir… puede pasarnos y, nuevamente, protegernos es algo que no debemos dejar de hacer. Algo importante tanto si somos propietarios de nuestra casa o inquilinos. Tener una cobertura nos asegura los gastos de refacción como de reposición de las pertenencias que hemos perdido.

3- Daños por agua

Antes de irnos de vacaciones notamos que había una pequeña pérdida en una canilla y decidimos “ocuparnos” al regreso… Y ahora que hemos vuelto ¡sorpresa! Tenemos daños por agua en nuestra cocina, o mucho peor, en nuestro piso… ¿Saben lo que significa? Problemas muy grandes que requieren de profesionales que se ocupen de ellos. No podremos hacerlo nosotros mismos. Y puede ser una situación compleja, con la vuelta al colegio de los peques y nuestro regreso al trabajo. Entonces… si hubiéramos tomado ese seguro de hogar con tantas ventajas… ¡A no arrepentirse así! Si podemos tener nuestro seguro listo y al día. Siempre es mejor “prevenir que curar”, como dice el refrán.

4- Falta de electricidad

Otro problema de los más comunes, pero que, además de no permitirnos la vida diaria…  ¡puede no dejarnos entrar en casa! Y, como vimos antes, requiere de la intervención de un profesional para su solución.

Los problemas eléctricos pueden tener origen en un desperfecto en nuestro hogar o haberse producido, por ejemplo, por inclemencias del clima en nuestra ausencia.

Lo cierto es que poder volver a restablecer la electricidad en casa requiere de una solución rápida. Y si contamos con nuestro seguro del hogar… ¡se soluciona en menos de lo que imaginamos!

5- Problemas de cerrajería, fontanería, cristalería, etc.

Cerraduras bloqueadas, ya sea por un problema funcional o porque tuvimos un intento de robo en casa. O, quizás, encontramos cristales rotos de puertas y ventanas por una tormenta, por un intento de robo hasta por nuestra mascota que se quedó al cuidado de un conocido en casa durante las vacaciones. Sin dejar de lado, por ejemplo, que podemos encontrarnos el toldo del patio roto por la última tormenta (en nuestra ausencia), la cañería del baño está obstruida o hay problemas con la carpintería de la casa (sea puertas o ventanas) que no estaban al irnos.

Todos, pero todos estos problemas comunes y probables tienen solución.  Si tuviéramos que contratar individualmente a personas para que arreglen cada uno de ellos ¿se imaginan el costo? Es por ello por lo que, nuevamente, es claro que contar con un seguro del hogar ¡es ultra necesario!

En conclusión… y aquí vamos con algo que algunos hemos aprendido por experiencia propia. Como les dije antes es mejor “prevenir que curar” y el seguro de hogar tiene, por lejos, muchas ventajas para nosotros. A tal punto que, si lo analizamos bien, su costo, al final del día no es tanto en comparación a todas las ventajas que tendremos si se nos presentan problemas como éstos. Claro que lo mejor es que ¡no nos pase nunca! Pero eso no está en nuestras manos evitarlo ¡prevenirlos y prepararnos si! 😉